banal | peligro

¿Qué sucedería si todo se quemara?
Así, sin mas.

Si aquella ropa que escogiste cuando tuviste edad para decidir y aun así copiaste del modelo en el aparador.. no estuviera

Si ese carro que tanta personalidad te confiere, que te da valor para hablar y que te otorga cierta distinción en el vecindario.. desapareciera

Si ese televisor al que tanto cariño le tienes y que te transporta a otras realidades, ese espacio amable que te entretiene mostrándote un jardín más verde.. no funcionara

Si ese espacio donde posas se redujera a cenizas, donde ya no hubiera balcones ni telones ni anunciadores

¿Serías alguien?
..o tu vida se ha convertido en una subasta
..o tu vida es mera apariencia
..o tu vida se ha quedado vacía
..o acaso eres un ladrillo mas


(Pienso en aquellos que valoran su vida por lo que poseen..  y río)


banal | fugaz

No todo en la web 2.0 ha resultado benéfico ¿Importa saber lo que la web 2.0 es?

Facebook es un sistema diseñado para gente ignorante que no tiene nada que hacer, sirve para que se discutan temas intrascendentes -y ocasionalmente estúpidos- y elevar una aparente popularidad que se respalda en la capacidad de agregar amigos de quienes no se ha sabido un carajo en los últimos años, así como la etiqueta que se suma en todos y cada uno de los grupos con nombres particularmente ridículos e insulsos.El desarrollo es sencillo de entender: la gente ha perdido la capacidad de asombro y hoy se mantiene concectada a la información masiva, a la eterna propaganda, a la música prefabricada y a la proyección de poder a través de valores materiales. No puede esperarse algo diferente si lo requerido en la modernidad depende de lo fugaz.

La televisión afecta terriblemente a las personas, las mantiene viviendo a través de una tercera persona, no sólo como expectante sino como sujeto participante, pues el habla que tiene necesita de ejemplos y de diálogos terceros (con ritmo, acento y yerros.) Antes se juzgaba a quienes se expresaban como si leyeran un guión teatral, y ahora, los chicos de moda sólo pueden hacer eso; cualquier persona con poco de inteligencia sabe que los ejemplos conllevan vulgaridad en la expresión. Antes se juzgaba a quienes espiaban y se entrometían en la vida ajena, y ahora, éstos dependen de ese voyeurismo alimentado día con día.

¿Y a qué viene todo esto?.. No hay que romperse la cabeza para entender lo siguiente: las personas con más amigos en facebook son las que tienen menos en la realidad, los perfiles más selectos y atractivos son los más lejanos de la realidad; aquellos que aparentemente están más conectados, hoy tristemente son los más desconectados. ¿Será que hay urgencia de vivir una vida para compartir? Parece que la urgencia está en el reconocimiento de nuestras vivencias, por ello tantas fotos sin sentido, por eso tantos ritmos simples, por ello perfiles del alter-ego avalados por esos otros fuera de sí, por eso la necesidad de hacer todo en un instante y vivir para ser visto, en total sentido de la exposición.

Hoy ya no tiene vigencia el espíritu.


Desazón para el día

Hoy en día, ante la pérdida severa del asombro y la constante búsqueda de satisfacción material que conduce a la felicidad -según parece-, existen actitudes que exponen esa condición y exhiben una conducta sin favorecerla ni negarla dramáticamente, sólo se muestran como consecuencia de esa constante (des)información que a todos nos abraza, incluso sin desearlo.

Los llamados mecanismos de defensa son expresiones psicológicas no razonadas que reducen, inhiben o ignoran acontecimientos estresantes, así como actos que inducen al sentimiento de angustia, frustración o amenaza, obligando a la persona a continuar con su vida como si no pasara nada.

Hoy pienso en uno de esos mecanismos en los que ya no se repara su existencia, y que sobresaltan la vulgaridad (o barbarie moderna) con plena sutileza.


Las llamadas palabras domingueras dejan en evidencia al sujeto que ha olvidado su capacidad cognitiva o que ha decidido, desde ya un considerable tiempo, negarse a la nueva búsqueda de información (y placer). Quienes concurren con ese mecanismo de defensa gritan a mil voces que no leen, que no les interesa permanecer como objetos ignorantes y que sus valores, si es que persisten, son comunes o al menos superfluos.

En algún lugar común, en un tiempo común y normalmente con una persona común, se ha escuchado que 'uno no debe discutir de política ni de religión' (¡cuidado con los verbos modales!), a lo que uno modestamente puede pensar: ¿y por qué chingados no?.. ¿por qué no sería posible debatir sobre un tema que influye constantemente sobre lo cotidiano? ¿qué problema tendría uno por debatir sobre la religión que se le impuso desde que no usaba la razón?.. para debatir sobre alguno de los temas, es necesario tener un amplio conocimiento al respecto. Evidentemente, si no existe tal conocimiento (o aunque sea el deseo de adquirirlo), es imposible progresar en alguno de los temas.


¿Cuándo fue la última vez que cuestionaste tus ideales?
¿Te parece prudente incorporar anglicismos para acceder a esa esfera social?
¿Prefieres la salida fácil de los mecanismos de defensa o aún ocupas la razón?


(des)información I

Uno nace desconociendo al mundo, y lo conoce al adquirir información. Pero qué sucede si la información que adquiere es aquella que se difunde en la programación -local o no, ya no importa. Sabiendo que gracias a su hábito, no es capaz de controlar sus costumbres y prefiere la televisión a cualquier otra cosa. Si gracias a su vida normal, no ha logrado adquirir una cultura sólida, manteniendo un bagaje muy pobre (alto para los estándares de educación en el país y la constitución.) Si no es capaz de vivir en calma, si no logra reflexionar (ya sea por el corto tiempo ora por la falta de información) ... Pues sucede que siendo la programación impersonal, sus ideas transcurren en tercera persona y su plática únicamente puede limitarse a eso, a citar ejemplos en un ambiente ajeno; quien conversa toma, incluso, la posición de esas terceras personas (voz, tono y ritmo); si la información que puede expresar es también aquella que el otro sujeto adquirió, la conversación pierde el sentido de intercambio, suceda o no, ya que puede lograrse esa charla sin sentido alguno, o que se prefiera callar. Además de perder la plática, lo que sucede es que la persona se vuelve un simple transmisor de mensajes 'controlados', y de nuevo, gracias a la costumbre, ejercita cada vez mas esa gran experiencia de desvanecimiento sustancial.

Si no hay noticias, bien puede seguirse un proceso (llámese telenovela, cobertura o proceso), porque al perder esa capacidad de abstraer (y pensar), lo único que puede mantener el negocio de la televisión es transmitir noticias que inviten a la comodidad y a la aparente adquisición de nueva información.

En este país se puede prescindir de un techo resistente, de comidas en el día o de control natal, pero no de un televisor.

Entonces, una vez mas, el problema se reduce a la información. Si no está disponible, o está limitada por imposiciones estratégicas, el sujeto crece, se desarrolla y muere -como un vegetal-, el problema es que en el trayecto, gracias a ese conocimiento, el sujeto será capaz de robar, matar, gobernar, mandar, sin olvidar la pose que tendrá a bordo del último modelo, la pose en el café de moda, la pose en la intrascendente comunicación social, engañándose en el programa de concursos, engañándose con reconocimientos, siendo avalado por sus otros.. y su herencia será tasada en moneda nacional y nada más.


Enormísimo Cronopio

[Rayuela, capítulo 68; Julio Cortázar]

Apenas él le amalaba el noema, a ella se le agolpaba el clémiso y caían en hidromurias, en salvajes ambonios, en sustalos exasperantes. Cada vez que él procuraba relamar las incopelusas, se enredaba en un grimado quejumbroso y tenía que envulsionarse de cara al nóvalo, sintiendo cómo poco a poco las arnillas se espejunaban, se iban apeltronando, reduplimiendo, hasta quedar tendido como el trimalciato de ergomanina al que se le han dejado caer unas fílulas de cariaconcia. Y sin embargo era apenas el principio, porque en un momento dado ella se tordulaba los hurgalios, consintiendo en que él aproximara suavemente su orfelunios. Apenas se entreplumaban, algo como un ulucordio los encrestoriaba, los extrayuxtaba y paramovía, de pronto era el clinón, las esterfurosa convulcante de las mátricas, la jadehollante embocapluvia del orgumio, los esproemios del merpasmo en una sobrehumítica agopausa. ¡Evohé! ¡Evohé! Volposados en la cresta del murelio, se sentía balparamar, perlinos y márulos. Temblaba el troc, se vencían las marioplumas, y todo se resolviraba en un profundo pínice, en niolamas de argutendidas gasas, en carinias casi crueles que los ordopenaban hasta el límite de las gunfias.


Escrito en glíglico, ese lenguaje de la intimidad. Se trata de un lenguaje musical que se interpreta como un juego. Es un lenguaje exclusivo, compartido por los enamorados, que los aisla del resto del mundo. Es una expresión íntima y sensual.


ideal


"El ajedrez constituye un medio eficaz para la educación
y formación del intelecto del hombre."